viernes, 28 de febrero de 2014

Una escusa como otra cualquiera: Torneo Blood Bowl 2014

 
¡Saludos generales!

El culpable principal de que mi escaso tiempo no se invierta en este foro, no es otro que el apoyo a la organización de un torneo de Blood Bowl en mi localidad de residencia por parte del CROM (Club de Rol Olesa de Montserrat). He abierto un foro al respecto en la lengua de Juanot Martorell donde haré el seguimiento pre y post evento.  

http://quedades-freaks-crom.blogspot.com.es/

Adelanto que tengo pendiente de hacer las fotos de dos artículos para este foro: el primero trata acerca de los espartanos de Impetvs, siguiendo la tónica de los Triplex acies; y un segundo dedicado a los normandos para Mordhnarog.

Hasta pronto.  

lunes, 3 de febrero de 2014

INFORME DE BATALLA IMPETVS: Magnesia 190 a.C.



En la batalla de Magnesia se enfrentaron un ejército seléucida comandado por el Rey Antíoco III contra las legiones manipulares del famoso Lucio Cornelio Escipión, hermano del Publio el futuro “africano” que participó en la campaña pero no en la batalla por estar enfermo, también estuvo ausente del mando su némesis Anibal Barca que por entonces hacía de asesor de Antíoco III sin demasiado éxito. Este fue el último intento de dar la vuelta a una guerra en la que los romanos y sus aliados siempre habían llevado la iniciativa. No obstante aquella tarde otoñal de 190 a.C. El desenlace era incierto. Ambos bandos se estaban apostando en las llanuras de Magnesia el dominio de Anatolia y el control del Egeo.
Desde la perspectiva actual es fácil dar por sentado que ganó quien tenía que ganar, pero para los contendientes aquella tarde nada estaba decidido e incluso durante el transcurso de la batalla el desenlace pudo ser bien distinto.

EL RESULTADO HISTÓRICO
La batalla comenzó por la tarde con el intercambio de proyectiles entre las vanguardias de hostigadores con desigual resultado. Pese a la abrumadora superioridad en caballería en el ala derecha, el rey seléucida no supo aprovechar esta ventaja y colapsar el flanco de su enemigo con su caballería catafracta, es más, cegado por su avaricia ataco infructuosamente el alejado campamento romano reiteradas veces dando libertad a los legionarios para acometer en el frente a placer. En el centro la infantería romana se comportó de forma soberbia; sus bajas fueron insignificantes y obligó a formar en cuadro a los desesperados falangitas al final de la tarde para no ser desbordados. Al otro lado del campo de batalla en el ala izquierda, el príncipe Seléuco atacó de forma chapucera a los hostigadores y la caballería de Pérgamo tan desastroso fue el asalto que acabó en desbandada permitiendo al hermano de rey Eumenes llamado Atalao, acudir al rescate del campamento romano con 200 jinetes que pusieron en fuga a los catafractos de Antíoco. Al anochecer la derrota era total con más de cuatro mil bajas sembrando el campo de batalla contra las trescientas que sufrieron los romanos y sus aliados. El rey Antíoco III huía a Sardes y poco tiempo después firmaba la paz de Apamea donde los romanos exigirán las indemnizaciones bochornosas para el Imperio seléucida.

MAGNESIA COMO PARTIDA DE IMPETVS
Como partida para el wargame Magnesia es una de esas batallas fetiche ya que es perfecta para recrear:
  • Posee un equilibrio entre las fuerzas, teniendo presentes sus puntos fuertes y débiles. Además de las singularidades específicas, algunas muy exóticas como por ejemplo elefantes, carros falcados y los duros veteranos legionarios.
  • El espacio de la batalla es una magnífica y despejada llanura, sin elementos de escenografía que interfieran en la carnicería. Además de estar bastante acotada; por lo que será fácil de representar.
  • Es una batalla bien documentada (como todas las victorias romanas), podemos encontrar mucha información que nos facilita la creación de las listas.
  • Cuenta con una gran variedad de tipos de tropas; cosa arto extraña en la antigüedad pues lo normal era que las tropas fuesen de pocos tipos. Y que los jugadores tengamos que regular las cantidades.
  • La batalla tiene cuatro mandos bien diferenciados más otros tantos intermedios. A efectos de Impetvs con el número de puntos implicados. creo que bastará con cuatro principales por bando para realizarla satisfactoriamente.
Para llevar a cabo la partida se han confeccionado dos listas de seiscientos puntos (aunque me pasé con los cálculos creo que le da más equilibrio ajustándome así a las fuentes). De hecho es la batalla más grande de Impetvs que he participado aunque sea como árbitro. Estos son algunos de los criterios seguidos para su diseño:
  • Las listas han sido extraídas del Extra Impetvs 4, se han ajustado algunos detalles.
  • Los mandos han sido reducidos a cuatro por bando, por lo que será una partida clásica de Impetvs con la salvedad de que se juega a más de seiscientos puntos. Los mandos C-in-C Seléucidas están obligados a desplegarse con las unidades de caballería (nótese que en la lista aquí presentada solo tiene asterisco las unidades de caballería).
  • Las Unidades han sido agrupadas antes de dárselas a los jugadores. Los participantes tendrán libertad para desplegar según sus intereses.
  • Aplicaremos una regla de la casa para el descontrol de los elefantes (ver partida).
  • El campamento romano defendido por Marco Emilio tiene VBU de 3, en vez del 2 habitual, para representar la determinación de los defensores y su líder.
  • La caballería catafracta será considerada impetuosa tal y como explica el reglamento (ver apartado 5.3 del reglamento)
  • No hay ninguna regla respecto a la mesa de juego de 180x120 sin elementos de escenografía apreciables.
  • Los jugadores recibirán una descripción somera de la lista contraria antes del despliegue para que se hagan a la idea del enemigo que se van a encontrar. Es importante añadir que a los jugadores se les aviso que participarían en una batalla de la antigüedad, a Impetvs, pero no les informé de cual para evitar que se pusieran a buscar información en la red como posesos.
  • Para jugar la partida han sido utilizadas miniaturas de mí colección personal pintadas chapuceramente pero resultonas. De 15/18mm de las marcas Xyston, Corvus Belli y Warmodelling.

EL EJÉRCITO DEL IMPERIO SELÉUCIDA Later seleucids (205-83 BC)
Us
Unidad
M
VBU
I
D
VD
Pts
NOTAS
2
1
CP Agema cataphracts*
8
7
3
B
6
70
Impetuous
3
3
CP Cataphracts*
8
6
3
B
9
84
Impetuous
2
2
CL Skythians*
12
4
1
B
4
54
Comp bow B
2
1
FP Argyraspides**
5
5
1
B
3
37
Pike
6
3
FP Phalangites**
5
4
1
B
12
90
Pike
3
3
EL Elephants
8
6
5
C
6
84

2
1
FL Thuerophoroi**
8
5
1
B
4
46
Long spear
2
2
CF Scythed Chariots
8
2
5
C
-
14

4
2
FL Galatians
8
4
4
C
4
42
Impetuous
1
1
S Asiatic archers
8
2
0
B
1
12
Short bow B
4
4
S Asiatic slingers
8
2
0
B
4
48
Sling
1
1
CL Beduin camelry
12
3
1
C
1
16
Camel
2
2
CM City militia
12
3
1
C
2
28

Mandos Principales* C-in-C: El Rey Antíoco III, Regular (20ptos) y el Príncipe Seléuco, Malo (10ptos); Estructura Mala (0ptos).
Mandos secundarios** Zeuxis, Malo (10ptos) y Filipo Minion, Regular (20ptos).
VDR 30
Total 657 ptos
LEGIONES DE ROMA & REINO DE PÉRGAMO. Middel republican romans (264-149 BC)
Us
Unidad
M
VBU
I
D
VD
Pts
NOTAS
2
2
CM Roman/socii legio XIV*
10
4
2
B
4/5
19

3
3
FP Hastati Veteran legions*
5
6
2
A
9
99
Pilum
3
3
FP Princeps Veteran legions*
5
6
2
A
9
99
Pilum
3
3
FP Princeps extraordinarii*
5
6
2
A
9
99
Pilum
3
3
FP Hastati Veteran legions*
5
6
2
A
9
99
Long spear
3
3
S Velites Veteran legions*
8
3
0
B
3
42
Javelin
2
2
S Cretan archers
8
3
0
B
2
28
Short bow B
1
1
EL Elephants
8
5
4
C
1
21

1
1
CL Pergamene light cavalry*
12
3
1
B
1/3
21
Javelin
2
1
FL Macedonian thurephoroi
8
5
2
B
4
48
Long spear
Mandos Principales C-in-C*: Lucio Cornelio Escipión Experto (30ptos) y Eumenes Rey de Pérgamo Regular (20ptos); Estructura good (20ptos).
Mandos secundarios*: Marco Emilio, Regular (20 ptos) y Domitus Ahenobardo, Regular (20ptos).
**Hace referéncia al número de unidades. Nº se refiere al número de peanas.
VDR 27
Total 671 ptos


DESENLACE DE LA BATALLA DE MAGNESIA SEGÚN IMPETVS.
¡Por fin hemos podido quedar! Tres meses han sido necesarios para poder reunir a tres jugadores. Toda una demostración de capacidad organizativa y logística por parte de nuestro grupo.
Aunque contaba con poder mantenerme al margen de la partida y hacer de árbitro finalmente me ha tocado jugar. He de reconocer que esta partida ha sido una de las más divertidas y emocionantes que he participado. He podido comprobar que Impetvs, ya de por si un gran juego, gana enteros si se realiza con listas de ejércitos grandes pude comprobar que el ritmo de juego no se hizo en ningún caso lento o farragoso.
La narración de los hechos ha sido realizada desde el punto de vista romano (para nada sesgado o partidista), ya que fue el bando que me toco llevar por ausencia más que justificada de los otros jugadores (uno de ellos aseguraba que su matrimonio peligraba si se le ocurría asistir a la batalla y pese a mi ofrecimiento desinteresado de un sofá cama mientras arregla los papeles del divorcio, continuó declinando mi invitación a la partida, así que jugué solo con los romanos). He de decir que durante la confección de las listas de los dos ejércitos pensaba que los romanos estaban en franca inferioridad táctica, lo cierto es que durante del desarrollo de la batalla pude comprobar gratamente que estaba equivocado.
Despliegue Romano
Así pues los dos ejércitos desplegaron en la llanura de Magnesia a última hora de la tarde (Las diez de la mañana hora local). En cuanto al despliegue un principio estuve más que tentado de formar una línea corta para concentrarme en una sola ala enemiga pero al final opté por un despliegue absolutamente clásico: En el centro las centurias y en las alas la caballería.

Mis contrarios tampoco realizaron un despliegue innovador: caballería en las alas y el centro la infantería precedida por los hostigadores, los carros falcados y los elefantes.
Despliegue Seléucida
Empezó la batalla con un avance decidido del Rey Eumenes en el ala derecha que pretendía superar el flanco de los seléucidas, Por desgracia mi intento no logro superar la línea del frente y pese al desorden en la unidad de catafractos consiguieron reagruparse y cargar brutalmente contra la unidad de caballería del Rey que cayó fulminado por una lanza kontos.
 
Eumenes queda eliminado y su mando desbandado

Tal fue el destrozo que todo el mando bajo Eumenes huyó. El efecto de la tirada en la tabla de perdida de un general 8.2 fue catastrófico. No obstante los beneficios de esta prematura victoria no fueron explotados por mis enemigos durante el resto de la batalla, gracias a que las caballería a las órdenes del príncipe Seleuco realizó un avance tímido y desorganizado con lo que dio aire a los romanos para seguir combatiendo pese a la perdida completa de un ala.
Mientras en el centro las legiones manipulares seguían avanzando al encuentro de los falangitas justo frente a ellos los vélites demostraron su superioridad frente a los honderos asiáticos (amén de una potra con los dados fuera de lo común). Incluso consiguieron provocar el descontrol de una de las peanas de paquidermos que apunto estuvo de chocar contra un sintagma de falangitas ¡Una lástima!
Hago un inciso respecto al movimiento descontrolado de los elefantes ya que nosotros hemos adoptado una regla casera al respecto: Cuando una peana de elefantes se descontrola lanzamos un dado de diez caras junto a la peana, al detenerse el dado señala con su punta superior una dirección y marca un número de U en centímetros. Giramos la peana y desplazamos la miniatura dicha distancia (es una regla rescatada del reglamento Operation Squad para el desvío de las granadas).Hecha la aclaración continúo con la narración de los acontecimientos.
Mientras, en el ala izquierda, los arqueros a caballo scityans comenzaron a aproximarse peligrosamente; así que Domitus Ahenobardo se lanzó precipitadamente a su encuentro y los hizo retroceder hasta destrozar en su persecución a una de las unidades de arqueros. Por desgracia el avance se acercó en exceso a la poderosa caballería catafracta del Rey Antíoco III que para postre había pasado a ser experto inspirado por la batalla. Pese a la superioridad numérica Ahenobardo mantuvo a raya toda el ala y si los triarios hubiesen llegado posiblemente podría haber cambiado el curso de los acontecimientos.

De regreso con mi narración al centro del teatro donde las tropas están a distancia de choque, y viendo que el príncipe Seleuco empieza a aproximarse me veo obligado a apretar el paso a riesgo de perder la formación de los manípulos, sin riesgo no hay victoria, gracias al elevado valor de disciplina no hay ningún desorden preocupante antes del choque. Desgraciadamente tras la muerte del Rey los arqueros cretenses a sueldo del monarca pusieron pies en polvorosa; lo que me dejó sin la posibilidad de atacar a los elefantes enemigos y reducir su poderoso valor de ímpetu.
Por lo que chocaron contra mis manípulos en perfecto estado. Los carros no hicieron absolutamente nada y pudieron ser eliminados, o bien a disparos o bien en combate cuerpo a cuerpo. Al llegar la noche la diferencia entre bajas hacía prever un trágico desenlace para los romanos así que Lucio Cornelio hizo tocar retirada.
El carro llegó tocado y fue rápidamente destruido 
Momento en el que se recupera la formación de los elefantes


Cerca estuvo la victoria para los romanos y sus aliados. De hecho creo que cometí una serie de errores de bulto (con la caballería en las alas), los cuales fueron la causa de mi derrota. En absoluto el ejército seléucida tuvo a su alcance una fácil victoria como yo me temía. Todo lo contrario a mitad de partida, pese a la perdida de toda un ala, los legionarios consiguieron reducir la diferencia de puntos de victoria hasta casi equiparar el tanteo.
Panorámica del campo de batalla casi al completo. Los marcadores azules son de oportunidad, los amarillos de desorden.
A la derecha el Rey Antíoco III (Oriol) y a la izquierda el príncipe Seleuco (Jordi) comunicándose por señas ya que se encontraban en las puntas opuestas del campo de batalla. En este caso realizaban la ridícula señal del camello, no confundir con el egipcio. Padre e hijo se entendieron a la perfección durante toda la batalla y así evitaron la deshonrosa paz de Apamea.